Con la presentación en las cortes del anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética (PLCCTE) se inicia en España un primer paso imprescindible para trabajar en un horizonte neutro de emisiones antes de 2050.
El principal objetivo del anteproyecto Ley de Cambio Climático y Transición Energética radica en despegarse definitivamente de los combustibles fósiles y de las emisiones de gases de efecto invernadero como máximo en 2050. De esta forma y, con perspectiva gubernamental, trata de sentar las bases para que España cumpla con sus compromisos climáticos Internacionales como los Acuerdos de París, el Plan Verde de la UE o los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Junto a ello, y en línea con lo que propone la Unión Europea, se trata de una oportunidad para salir de la actual crisis económica del coronavirus a través de un desarrollo económico, social e industrial mucho más sostenible y racional. En etecnic ya apuntábamos algunos detalles al respecto en el último artículo: Ha llegado el momento de acelerar la Transición Energética.
Todavía queda un largo camino que recorrer. Pero tanto las noticias que nos llegan de la UE sobre ayudas a las renovables, la movilidad eléctrico o la rehabilitación de edificios como esta ley, suponen un primer paso imprescindible.Vamos a analizar brevemente sus puntos clave.
Las claves del anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética
- Primer objetivo 2030: para ese año el objetivo es reducir los gases de efecto invernadero en al menos un 20% respecto a 1990 y generar el 70% de la electricidad con renovables.
- Obligatoriedad de zonas de bajas emisiones: teniendo en cuenta que el tráfico por carretera representa un 25% del total de la emisión de GEI y un tercio de ello se produce en zonas urbanas, los municipios de más de 50.000 habitantes y los territorios insulares deberán establecer zonas de bajas emisiones no más tarde de 2023.
- Impulso a las energías renovables: antes de 2050, el sistema eléctrico español deberá trabajar al 100% con energía renovable. El anteproyecto incorpora un artículo para promover y facilitar la eficiencia energética y el uso de fuentes renovables en el ámbito de la edificación.
- Apoyo al autoconsumo: Se crea la figura del titular de almacenamiento para implantar y favorecer el desarrollo de estas tecnologías. También se instituye la figura del agregador independiente que participará en el mercado comprando o vendiendo energía. Además, se impulsa la hibridación para incorporar distintas tecnologías de generación en una misma instalación y la repotenciación de las instalaciones con la posibilidad de aumentar su potencia instalada para optimizar el uso del recurso renovable en los mejores emplazamientos.
- La rehabilitación de edificios como clave para la eficiencia energética: Se promoverá y facilitará el uso eficiente de energía y el uso de fuentes renovables en la edificación alineando la estrategia a medio largo plazo para la renovación de edificios con el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.
- Impulso a la movilidad sostenible, eficiente y eléctrica: Creación de una plataforma pública de información sobre puntos de recarga. El Código Técnico de Edificación establecerá las obligaciones relativas a la instalación de puntos de recarga en edificios de nueva construcción y edificios existentes. Las nuevas estaciones de servicio o aquellas que acometan una reforma que requiera revisión de su título administrativo, deberán instalar al menos un punto de recarga igual o superior a 50kW de cc. También deberán hacerlo aquellas que tengan un volumen de ventas superior a 5 millones de litros de combustible fósil. El anteproyecto de ley de Cambio Climático y Transición Energética también dispone que todas las administraciones deberán adoptar medidas para alcanzar en 2050 un parque de turismos y vehículos comerciales ligeros sin emisiones directas de CO2. Sobre la prohibición de vender vehículos diésel o gasolina más allá de 2040 hablaremos más adelante, ya que ha suscitado controversia y debate. El próximo Plan MOVES 2020, puede ayudar a todas aquella empresas o administraciones a trabajar ya en esa dirección gracias a los distintos paquetes de ayudas que ofrece el programa.
- Complementación de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética con el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima: Los dos instrumentos se complementan e integran el Marco Estratégico de Energía y Clima para el período 2021-2030. La función de la nueva ley es regular de manera directa para dirigir al país hacia el objetivo climático mientras que el PNIEC planifica y define los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, de implementación de energías renovables y eficiencia energética, así como las principales líneas de actuación. Además, es revisable.
Lo bueno y lo menos bueno de la LCCTE
En Etecnic creemos que esta ley llega tarde, pero llega. Por este motivo aplaudimos este primer paso imprescindible. Un primer paso necesario y positivo, ya que regulará de manera estratégica para avanzar en una dirección correcta y absolutamente necesaria.
Pero la realidad es que no solo llega tarde en el país, sino también llega tarde respecto a nuestros vecinos europeos. Algunos ya están trabajando en esa dirección con leyes marco similares desde hace tiempo. Por ejemplo, países como el Reino Unido quien con la UK Climate change Act 2008 ya consiguió reducir las emisiones de gases contaminantes en todo el Reino Unido.
¿Es la ley de Cambio Climático y Transición Energética suficiente? Probablemente no. Pero sin lugar a duda es una oportunidad para sentar las bases de la transformación económica, social e industrial para poder dar un giro exponencial al tejido económico de un país tan centrado en el turismo. Supone una oportunidad, ya que España dispone de todos los instrumentos para tener éxito y ser pionero en convertir la transición energética en un pilar fundamental de su salida de la crisis del covid y de su crecimiento económico.
En primer lugar, la península. Por su situación geográfica y orografía es una auténtica pila energética renovable donde aprovechar esa fuente tan rica como es el sol para generar energía de manera renovable.
En segundo lugar, no paran de crecer el número de empresas que apuestan por nuevas tecnologías ligadas a la sostenibilidad y la eficiencia energética y el potencial de I+D de estas es enorme (Etecnic se encuentra en el numero 22 de las 800 empresas jóvenes que más crecen en España según un informe de Iberinform). Solo hace falta un dato: el 90% de la fabricación y venta puntos de recarga e instalaciones del país son obra de empresas españolas. En la industria de inversores solares tenemos a dos gigantes como son Power Electronics y Ingeteam. Por este motivo, la responsabilidad que tiene el Estado de aumentar las inversiones en I+D es muy grande. Y de ello dependerá dar un salto diferencial.
Sabemos que el potencial es enorme, aunque algunos no vean o no quieran trabajar en esta línea. En este sentido, la presión de los lobbies automovilísticos que se niegan a avanzar cuanto antes en la electrificación de la movilidad y en conseguir un parque automovilístico libre de emisiones se ve reflejado en los timmings de la ley (2050!). Solo hace falta comparar 2 noticias: cuando anfac denuncio la ley de cambio climático de Baleares a la UE y cuando anfac aplaude el nuevo anteproyecto de ley, ya que podrá seguir fabricando y vendiendo coches de combustión durante un par de décadas.
Por suerte, y aun estando España en la cola en fabricación de vehículos eléctricos, no todos los fabricantes del país han seguido línea de opinión. Un claro ejemplo es Irizar. El fabricante vasco de vehículos pesados como autobuses, autocares y camiones decidió prescindir de la fabricación de vehículos propulsados por energía fósil y apostó por líneas híbridas y mayormente eléctricas. La clave reside en apostar por un sector emergente e ir sustituyéndolo por otro que está en decadencia.
